
Este tinto lo habíamos probado en otra ocasión pero no nos paramos en saborearlo, ahora si que lo catamos con una buena chuleta y resultó todo un acierto.
Este crianza cuesta alrededor de 9 euros, nos abren la botella y dejamos airear ya que tenemos q esperar por la comida, vertimos la bebida y es de color rubí viendo que el vino tinta el cristal de la copa y en su borde es anaranjado. Lo pasamos por nariz y es suave aunque nos pega un golpe, típico de los Riojas del alcohol, pero es ínfimo, notamos el paso por barrica tanto por su color y olor como por el sabor ya que esa sensación rasposa que se te queda por los taninos apenas se percibe y está bien pulida. En boca destaca las frutas rojas y el sabor persiste unos 4 a 5 segundos y hacen q se te apetezca otra copa de caldo.